LA SOCIALDEMOCRACIA Y EL SALVAJE
LIBERALISMO ECONÓMICO
José Luis ValdésLIBERALISMO ECONÓMICO
El salvaje liberalismo económico que practican los gobernantes burgueses y partidos socialdemócratas en la Unión Europea y en la mayoría de los países y pueblos del mundo, entre ellos Canarias, basado en la falta de ética, la corrupción y el pragmatismo mas absurdo, fruto de una mentalidad enfermiza del todo vale con tal de conseguir beneficios, arrastran a las clases populares más desfavorecidas a la pobreza más severa, sólo comparable a la época de la depresión de los años 20, que culminó con la caída de la bolsa de Wall Street, en los Estados Unidos, y la toma del poder de regimenes racistas y fascistas en Europa. Y como colofón, la II Guerra Mundial y el aniquilamiento físico de más de 50 millones de personas.
Las crisis continuadas son fruto de dicha política, y afectan a las bolsas y empresas de todo el mundo. Todo esto conlleva a un aumento del paro en los países de la Unión Europea, que ya sobrepasa los 30 millones de desempleados. También crea una mayor inflación y un aumento de la pobreza, que ronda ya los cerca de 40 millones de pobres en los países de la llamada Europa de la abundancia y el bienestar, sin contar con la hambruna que hoy día viven los pueblos del vecino continente africano, que hace que sus mejores hombres y mujeres se lancen a la muerte en busca del pan para ellos y sus familias.
Para el gran ejército de parados y desposeídos que no tenemos nada que perder, sólo nos queda un único camino para cambiar el curso de la historia y forjar un porvenir mas halagüeño, que es organizar nuestra rebeldía contra el despotismo de los burócratas y gobernantes como.
Tenemos que unir a la vez nuestros esfuerzos contra los dictados burocráticos de Bruselas, que se ha convertido en el sostén del gran capital, jugando el papel de la burocracia colonialista y metropolitana del imperialismo europeo contra la mayoría de los ciudadanos, que cada día nos encontramos mas desamparados ante las agresiones de las multinacionales.
Monopolios transnacionales, empresarios sin escrúpulos y burócratas deciden sin importarles mucho los ciudadanos.
Cuatrocientas familias de magnates multimillonarios, repartidos a lo largo del planeta controlan la economía mundial.
Como dice Jean Ziegler, sociólogo y diputado suizo: "no hay diferencia entre el capitalismo monopolista y la mafia".